Una temporada en la Tierra o ¿Quién dijo que Dios dijo?… una visión crítica de Jesús Díaz

Por: Arturo Carrasco — 28 de enero, 2011

“El cínico humor iracundo de Twain encuentra como vehículo el lenguaje clown en su versión más ácida”

Decía el escritor italiano Giovanni Papini que una de las características del diablo, como lo demuestran varios pasajes bíblicos, es su capacidad para poder ir y venir entre el cielo y la tierra y, a su vez, poder dialogar con Dios y (como queda plasmado en el inicio del “Libro de Job”) e informarle sobre el estado de la tierra y sus creaciones, específicamente, el ser humano.

Pues bien, todas estas capacidades sobre las que Papini se encarga de llamar nuestra atención se vuelven, gracias a la virtud y talento del director Jesús Díaz, un medio para hacer una humorística y ácida crítica sobre las eternas contradicciones del ser humano; esto, con apoyo de técnicas clown en la puesta en escena Una temporada en la Tierra o ¿Quién dijo que Dios dijo?

Basada en la novela Cartas desde la tierra, este texto que refleja la genialidad y cínico humor de su autor Mark Twain, en un montaje escrito y dirigido por Jesús Díaz, director de La Sensacional Orquesta Lavadero. Una apuesta muy bien llevada que se está presentando todos los domingos en el Foro La Gruta del Helénco a partir del pasado 23 de enero.

Una obra que muestra a un Luzbel irónico, irreverente y, sin embargo, conmovedor, interpretado por el actor salvadoreño Ermis Cruz, quien encarna este carismático personaje que después de ser expulsado del cielo decide visitar la tierra sólo para darse cuenta de que, lo que parece ser la máxima creación de Dios, el ser humano, contradictorio, absurdo e incomprensible, lo cual le hace caer en la desesperación.

Un ser, como les comenta a sus amigos los arcángeles Gabriel y Miguel, que no puede comprende una sociedad colmada de contradicciones y violencia que no se ha dado cuenta, como dijera Shakespeare, que no hay nada bueno ni malo; sólo es el pensamiento humano el que lo hace aparecer así.

Para su director Jesús Díaz la temática abordada es compleja, “no pretendemos agredir a la religión, buscamos hacer reflexionar al espectador sobre las creencias y supersticiones que guían la vida humana, invitándolos a creer con inteligencia, no sólo en una fe ciega”.

Respecto al lenguaje clown que utilizan en la puesta en escena, explicó que no fue tarea fácil; “este lenguaje está de moda, pero sólo superficialmente, nosotros empleamos los elementos básicos del clown, gestos y giros, sin la necesidad de buscar la risa”.

Por su parte, Ermis Cruz dice que este lenguaje es un reto, pues antes de conocer a Díaz desconocía esta técnica. Sin embargo, subrayó que ha contado con una excelente preparación y dirección.

La Tierra o ¿Quién dijo qué Dios dijo?, no tiene como fin ofender las creencias de las personas, sino más bien, generar una reflexión y despertar entre los espectadores cierta controversia que los lleve a amarla u odiarla.

La relación entre Dios y el hombre, es aquel vínculo que quiere simbolizar la forma más sublime de la reverencia y el amor, pero que frecuentemente se manifiesta en forma de desgracias, tribulaciones y abandono.