Gergely Bogányi en la celebración del bicentenario de Franz Liszt

Por: Enrique R. Mirabal — 1 de mayo, 2011

Gergely Bogányi, piano, se presenta en el Palacio de Bellas Artes, con un homenaje a Franz Liszt en su Bicentenario de su natalicimiento, mayo 2011 El pianista húngaro rinde tributo al romántico vistuoso el 21 de mayo en Bellas Artes.

Si Mozart fue el niño prodigio que deslumbró a los salones europeos a fines del siglo XVIII, Franz Liszt (1811-1886) pasó de ser el enfant gâté de la corte vienesa a un anciano venerable (al menos en aspecto y reputación) que siguió arrancando vivas y suspiros del público, especialmente de las damas, doquier se presentara.

No le costó mucho trabajo ganar fama y aplauso, eso sí, muchas horas de trabajo frente al piano, ejercitando manos bajo la guía de Czerny y recibiendo felicitaciones de Beethoven en sus primeros años de vida. De ahí en adelante, lo demás es historia. No es posible imaginar la música del siglo XIX, desde el romanticismo temprano hasta los extremos de la larga cauda que le sucedió, sin la música de Liszt, a pesar de su legión de detractores, antes y ahora.

Trascendental como sus famosos Estudios, fue la técnica desarrollada por el húngaro. Nadie había tocado antes como él, no sólo con las manos sino incorporando brazos al aire, hombros y gesticulación ampulosa a manera de enfáticos acentos, capaces de sorprender y enardecer a las nutridas audiencias.

En su delirante película Lisztomanía (1975), el británico Ken Russell, adicto a la grandilocuencia, concibió a un Franz Liszt a manera de estrella pop contemporánea- de hecho, Roger Daltrey líder de la banda británica The Who y protagonista de Tommy, su anterior ópera/rock es el encargado de interpretar al pianista. Puede decirse que fue el primer artista seguido por una legión de, en este caso particular, “frans“.

Gergely Bogányi, piano, se presenta en el Palacio de Bellas Artes, con un homenaje a Franz Liszt en su Bicentenario de su natalicimiento, mayo 2011 El Liszt compositor no sólo escribió para el piano, fue también un orquestador brillante, promotor del leit motiv y la música programática y escribió sinfonías y poemas sinfónicos muy vigentes en las salas de concierto.

Lo que sí es fácilmente identificable en uno y otro caso es la marcada preferencia por los acordes pomposos, la exaltación romántica, muy en su modo, y el brillo por encima de sutilezas. Famosas son también sus transcripciones y paráfrasis para piano de obras de otros compositores como Wagner, Mozart y Schubert.

Heredero de la escuela pianística de su compatriota, Gergely Bogányi (Vác, 1974) se asoma por la escena mexicana, después de su muy publicitada y exitosa serie de conciertos del 2010 en Guadalajara en los que interpretó un maratón Chopin, otro de sus compositores favoritos aparte de Franz que viene a ser un obligado para todo músico magyar.

Gergely Bogányi, piano, se presenta en el Palacio de Bellas Artes, con un homenaje a Franz Liszt en su Bicentenario de su natalicimiento, mayo 2011 Da gusto encontrar en su discografía obras de Bela Bartok, el músico referencial por excelencia de la creación pianística y orquestal del siglo XX y quien, por cierto, en su trabajo de campo a través del entonces Imperio Austro-húngaro, determinó que lo que se había considerado como música folklórica de Hungría a partir de las rapsodias de Liszt, es decir, el universo gitano, no era la esencia de la región, la cual descansa y así lo demostró, en melodías y ritmos de los campesinos, más emparentados con sus vecinos rumanos que con los aires gitanos.

Gergely Bogányi viene a ofrecer un recital conmemorativo en el Palacio de Bellas Artes y, por lo tanto, su programa estará armado a partir de las creaciones del homenajeado. Reconocido en Hungría y en otros países europeos y en Norteamérica acumula una serie de triunfales participaciones en numerosos concursos y festivales de los que ha salido multipremiado: tercer premio en Ettlingen, Alemania en 1990 y segundo premio en Epinal, Francia en 1991.

Gergely Bogányi, piano, se presenta en el Palacio de Bellas Artes, con un homenaje a Franz Liszt en su Bicentenario de su natalicimiento, mayo 2011 Bogányi ganó en tres ocasiones la competencia Helmi Vesa de la Radio de Finlandia así como en el internacional concurso Chopin y en las ediciones del Mozart en Budapest en 1993 y la competencia de música de la Universidad de Indiana en 1994. En 1996 obtuvo la Medalla de Oro en el “Concurso Internacional Franz Liszt” de Budapest.

Gergely Bogányi incursiona en la música desde Bach hasta la de los últimos románticos y tiene una amplia discografía en la que no descuida la música de cámara. Ha grabado sonatas para violín y piano con su colega Barnabás Kelemen. Tiene agenda completa en este 2011 interpretando a Liszt y Chopin y estará en el Festival de Música de Newport en próxima fecha. Aunque no es su primera visita a la Ciudad de México -en 2010 dio un recital en la Sala Neza- ya será capaz de convocar a un público numeroso y con muchas ganas de revisitar las hazañas que patentó Liszt en el siglo XIX.

Gergely Bogányi
Franz Liszt (1811-1886) Bicentenario de su natalicimiento
Palacio de Bellas Artes, 21 de mayo, 19:00 hrs.

Programa

Chopin-Liszt
(1810-1849)

* Wiosna (Primavera)
* Moja Pieszczotka (Mi amor)

Schumann-Liszt:
(1810-1856)

* Liebeslied

Schubert-Liszt
(1797-1828)

* Gute Nacht (Buenas Noches)
* Die Post
* Du bist die Ruh
* Auf dem Wasser zu singen
* Die junge Nonne
* Erlkönig

Wagner-Liszt
(1813-1849)

* Isoldens Liebestod

Intermedio

Liszt
* Sonata en Si menor

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“Uno no debe permitirse salir al escenario sin estar preparado en cuanto al conocimiento del personaje que se interpreta, si el ballet tiene una historia hay que contarla y vivirla lo mas real posible. Como intérprete, el reto es hacer llegar y entender al público la historia solo con los movimientos del cuerpo”, Raúl Fernández, diciembre 2009.