Por: Enrique R. Mirabal — 4 de octubre, 2009
La Sinfónica Nacional cambia de sede esta temporada, la cita es en el Blas Galindo del Centro Nacional de las Artes.
Después de algunos meses de ofrecer sus conciertos en el Teatro Hidalgo –por aquello de permanecer lo más cerca posible del Palacio de Bellas Artes y en aras de lo consuetudinario–, nuestra Orquesta Sinfónica Nacional (OSN) se muda a un auditorio idóneo para finalizar el 2009 con una sonoridad acorde a las obras escogidas y un mayor disfrute del público.
El Blas Galindo del Centro Nacional de las Artes cobija desde ahora a los músicos de la OSN. Realmente la acústica del Hidalgo, un teatro que requiere de amplificación para que los textos dramáticos lleguen al oÃdo del espectador, no era una alternativa aconsejable cuando cerró sus puertas el Palacio pero se decidió probar suerte y no resultó.
Un público joven, estudiantes de música y de otras disciplinas serán los principales beneficiados con la decisión. Bien por aquello de que los actores, pintores y bailarines jamás pisan una sala de conciertos, salvo honrosas excepciones, Esqueda, GarcÃa Ocejo y Nierman, por ejemplo.
Desde septiembre, la OSN comenzó rindiéndole tributo a la música nacional con estrenos de música mexicana y la programación de obras obligadas para la ocasión. En esta Temporada, como de costumbre, tendrá invitados especiales como solistas junto al director titular Carlos Miguel Prieto.
De la oferta musical, la escala se extiende desde el barroco hasta la música contemporánea incluyendo obras monumentales junto a otras de repertorio; además, en la programación de este ciclo podrá escucharse más música mexicana como la SinfonÃa India de Carlos Chávez, un homenaje a Manuel de ElÃas por sus 70 años de vida y Música para charlar de Silvestre Revueltas.
El par de conciertos del 23 y 25 de octubre, le tocará el turno a un austriaco y un alemán. Del primero, Gustav Mahler, los Rückert Lieder y de Johannes Brahms, Un Réquiem Alemán.
Los solistas en las partes cantadas, Jonita Lattimore, Jesús Suaste y el Coro de Bellas Artes y el Coro de la Universidad Veracruzana.
El siempre bien recibido Vivaldi no defraudará a su legión de seguidores aunque para ellos sólo exista una de Las estaciones. Una novedad en la programación es el Concierto para corno y orquesta de John Williams con William VerMeulen como solista, un virtuoso del corno requerido en las mejores salas de concierto del mundo.
Brahms es el predilecto de la temporada y por ello, podremos revisar por quincuagésima vez sus cuatro sinfonÃas, piedras de toque en el género pero sobreexpuestas y en espera de una lectura creativa y original… pero no tanto que las transfigure, como dirÃa Schöenberg.
Entre los solistas, dos rusos con carrera internacional, el director Pavel Kogan que dirigirá la SinfonÃa No. 3 de Camille Saint-Saëns.
El plato fuerte de esta Temporada, la extraordinaria pianista Lilya Zilberstein que dejará en suspenso al auditorio al atacar con toda su artillerÃa técnica, el Concierto No. 3 de Prokofiev. Lilya está considerada entre las pianistas cimeras de hoy en dÃa, poseedora de un virtuosismo y una fuerza infinitas, herramientas que le permiten presumir un repertorio de amplio espectro sustentado ente lo más granado de la literatura pianÃstica.
La OSN sigue con sus populares Conciertos familiares con obras de gran aceptación -El aprendiz de brujo y otros-, extiende sus programas al Teatro Ocampo de Cuernavaca y continúa sus giras por el resto de la República.
Un listado de enlaces a centros culturales, música, teatro, danza, infantiles, festivales y medios y más.
Deja un comentario