Medea, la obsesión por alcanzar el placer del amor

Por: Interescena informa — 8 de febrero, 2016

Germán Castillo lleva a escena Medea, una versión libre que el director realiza con Mansell Boyd sobre el mito creado por Eurípides, una de las tragedias más intensas del teatro griego.

Es una parafrasis que se concreta a partir de la violencia, el odio y la venganza como una constante del ser humano. Es la presencia de este mito a lo largo de toda la historia de Occidente, la cual en gran medida reitera sucesos similares llevando las particularidades contextuales de nuestra actualidad.

Es en breve, la historia de tres personajes, Jasón, esposo de Medea y padre de sus hijos, quien se dispone a casarse con la hija de Creonte, mientras que Medea, quien huye de su tierra para estar con él, decide tomar venganza… Es la muestra que define los extremos aberrantes de los mortales ante la pasión.

Con la participación actoral de Dobrina Cristeva, Lorena Glinz y José Alberto Gallardo, Medea se sustenta en la colaboración de un gran equipo de creativos: Gabriel Pascal, en la escenografía e iluminación; Edyta Rzewska en el diseño de vestuario; y Rodrigo Castillo Filomarino, en la realización de la música.

Medea, se presenta todos los lunes a las 20:30 horas (hasta el 4 de abril), en el Foro La Gruta del Centro Cultural Helénico, una concepción escénica que Germán Castillo traduce como una glosa contemporánea al exprimir hasta donde la ficción le permite la esencia conductiva del Euripídes griego en un ejercicio sin ninguna consideración moral donde los celos permean ante la obsesión por alcanzar el placer del amor, una faena de vida donde las circunstancias cambian y aparecen mejores aliados para lograr lo anhelado. Así, la traición une los interesen y reemplaza los sentimientos.

“La obra se mueve genéricamente en las suaves arenas del melodrama, esto ha permitido una estructuración rotunda y ética –no moral– de la tragedia de Euripídes”, Germán Castillo. Fotos: Maritza López.