Lulu de Alban Berg, desde el Metropolitan Opera a la mega pantalla del Auditorio Nacional

Por: Interescena informa — 20 de noviembre, 2015

En este cierre de la temporada 2015 del Metropolitan Opera, el Auditorio Nacional proyecta Lulu, nueva producción de esta obra icónica del siglo 20 creada por el compositor austríaco Alban Berg, que se transmite por primera vez en alta definición desde Nueva York con la dirección concertadora de Lothar Koenigs.

Con la participación de la soprano Marlis Petersen como Lulu, la mezzo-soprano Susan Graham en el papel de la Condesa Geschwitz y el tenor Daniel Brenna interpretando a Alwa, además del tenor Paul Groves (Painter/Negro) y los barítonos Johan Reuter (Dr. Schön/Jack El Destripador) y Franz Grundheber (Schigolch) como las voces principales de esta composición, creada en la técnica de la música dodecafónica, que permaneció incompleta hasta la muerte de Berg que desafortunadamente dejó sin terminar el tercer acto, el cual no sería concluido hasta 1979 por Friedrich Cerha, al fallecer la viuda del compositor, quien había prohibido escribirlo.

Lulu de Alban Berg –que fue estrenada en el Metropolitan Opera en 1977 con las voces de Carole Farley y Tatiana Troyanos dirigidas por James Levine–, se presenta vía satélite desde Nueva York, mañana sábado 21 de noviembre en la megapantalla del Auditorio Nacional, una ópera vanguardista que en su lectura machista, dirían algunos, señala los vicios y virtudes de la condición femenina a través de la visión teatral de William Kentridge.

Un artista multifacético que logra el perfecto balance entre el dramatismo y la picardía que requiere esta polémica trama que refleja la complejidad de una sociedad acartonada que se inscribe a partir de dos tragedias del dramaturgo alemán Frank Wedekind: Erdgeist (Espíritu de la Tierra) y Die Büchse der Pandora (La caja de Pandora).

Una tragedia del belcanto que narra el ascenso y la caída de una ‘femme fatale’ de belleza subyugante y moral indomable, que descubre a la mujer como objeto de deseo que lleva a los hombres a la total perdición, a la esposa infiel, a la amante superficial, a la estrella de cabaret, a la prostituta, a la asesina y en consecuencia fugitiva que como trágico final del destino, culmina sus días a manos del famoso Jack el Destripador. Fotos: Ken Howard.