Todas las Julias del mundo, una obra donde Fausto Ramírez transita por la farsa, la sátira y el drama

Por: Roberto Sosa — 13 de noviembre, 2012

San Luis Potosí, 12 de noviembre 2012. Enviado especial. Cinco actores discuten sobre la puesta en escena que van a presentar, imaginan un telón, la iluminación, una gran producción; la realidad es un formato íntimo, en un espacio vacío con lo más elemental para ofrecer la función…

Todas las Julias del mundo, es una intervención libre de Fausto Ramírez a partir del texto de August Strindberg –La Señorita Julia, título original–, que plantea la relación de poder y seducción entre Julia, heredara de un importante linaje, quien es agobiada por el estigma familiar de la locura, y Juan un empleado de la familia con aspiraciones a salir de su condición de subordinado y con el sueño de escalar en la pirámide social.

Julia seduce a Juan para llenar su vacío existencial; Juan es su guarro, su chofer, el que se deja seducir. Cristina es la chacha, novia de Juan.

Strindberg tiene en su obra personajes vacíos, carentes de afecto y emocionalmente inestables. Como autor ha escrito otros dramas como El padre, El sueño (que actualmente se presenta en el Teatro Juan Ruiz de Alarcón de la UNAM) y El pelícano, entre muchos más.

Todas las Julias del mundo, es un proyecto de la compañía A la deriva Teatro que se presentó con las actuaciones de Alejandro Rodríguez, Adrián Gaitán, Edith Castillo, Mely Ortega y Viridiana Gómez en la Muestra Nacional de Teatro 2012 que se celebra en San Luis Potosí.

Fausto Ramírez la escribió respetando el texto original casi es su totalidad y creó una versión libre donde utilizó un lenguaje actual, con aquella forma de expresarse y sentir de las jóvenes parejas del hoy, aquellas pasiones que los mueven, que no cambian, que siguen vigentes, que son atemporales.

Esta idea lo llevó a trabajar en un laboratorio de experimentación actoral que dio como resultado una labor interesante, ágil, dinámica, diferente y sobre todo que atrapa al espectador, más en la primera parte de la obra; en esta se siente como los actores reflexionan y le hablan al público, sin embargo el ritmo no es sostenido, después de la primera parte, la obra se pierde, se cae y sólo por momentos vuelve a atrapar al espectador. Los actores hacen bien su trabajo, quien los dirige…

En esta su versión, Ramírez transita por la farsa, la sátira y el drama. En él nos presenta la historia de Julia y Juan –dos personajes que tienen una dualidad y son ambiguos– a través de cinco actores que se rolan los personajes e intervienen la escena para intercambiar los textos y hablarle al espectador del drama de Strindberg, pero con la contemporaneidad que Ramírez le impone a esta obra, la cual tiene como eje principal la lucha de poderes, de clase social, de seducción y de sometimiento.

Todas las Julias del mundo es un proyecto que representa el esfuerzo que se hace en el Estado de Jalisco y el marco ideal para presentarla es la Muestra Nacional de Teatro, que se celebra en San Luis Potosí.