Cervantes versos Shakespeare, un pequeño espacio de pensamiento y perturbación moral

Por: Miguel G. Calero — 13 de octubre, 2017

“Estamos tejidos por la misma tela de los sueños…” William Shakespeare.

Aquél que queda prendado de las letras, jamás se logra escapar de su poder. Qué animal tan misterioso es el humano, que ha creado las letras para definirse a sí mismo.

Cervantes versos Shakespeare es una obra que tiene una fuerza guionística increíble, tal cualidad es gracias a que su escritora y directora Aurora Cano ha sabido hilvanar con elegancia los versos y líneas de dos grandes clásicos de la literatura universal, con un argumento conveniente y muy adecuado para la situación actual de nuestro México.

Todo gira entre un encuentro anacrónico pero con vigencia del pensamiento de dos idealistas, indagadores de lo humano y sus demonios y un par de mexicanos desencantados de la nación que les ha visto nacer. Como es de esperarse, este encuentro es una inevitable confrontación entre valores e ideales de antaño que se ven amenazados por los intereses y la fragilidad de la naturaleza humana inclinada a la violencia y la injusticia.

“Todas nuestras locuras son por un estómago vacío y un cerebro lleno de aire…”, Miguel de Cervantes Saavedra.

Lo interesante es que ninguna de estas dos cosas son ajenas entre sí, esta confrontación se dio en tiempos de Cervantes y de Shakespeare, en Inglaterra y en España en el siglo XVII… entonces, ¿por qué tiene tanta vigencia para nosotros el día de hoy?, ¿los ideales jamás se rendirán?, ¿la violencia y la injusticia no tendrá fin?

Cervantes versos Shakespeare, es una invitación de Teatro Babel-Drama Fest para vivir un encuentro con nuestra propia posición frente a estas disputas humanas que nos acompañan a lo largo de la historia. En ella, la corrupción, la justicia, la violencia, la belleza, el amor, la amistad, la locura y la lucha por un mundo mejor son algunos de los temas centrales que a través de las hermosas letras y las distintas miras de dos grandes de la literatura nos llevan a pensar más allá de las respuestas sencillas.

El gobernador corrupto que huye atormentado por la culpa y perseguido por mafiosos se esconde en un espacio de turbulencias. Los sabios, Miguel de Cervantes y William Shakespeare habitan en un espacio indeterminado y fuera del tiempo, el espacio de los versos, las ideas y los grandes modelos de virtud no deben de ser espacios de fuga, de escape eterno que sirva para la comodidad de la cobardía; el gobernador y la mujer deportada que se encuentra en este lugar, tienen el deber de salir al mundo que les asecha… ¿para qué volver a una realidad terrible y desesperanzadora? Para luchar.

“El año que es abundante en poesía suele serlo también en hambre…”, William Shakespeare.

Es así como Cervantes y Shakespeare se convierten no en un espacio de fuga y de extravío, sino en un refugio listo para preparar la batalla contra la injusticia y la desvirtuada vida que se lleva en México. La preparación que ofrecen estos sabios es poderosa, yace en sus letras, en los sueños que han inmortalizado, mucho de aquello que al día de hoy necesitamos escuchar y leer para hacer todo cuanto esté en nuestras manos para cambiar nuestro entorno, a costa de cualquier precio.

El honor y la virtud son palabras que no significan nada para el gobernador y la mujer deportada, pero con ayuda de los poetas lograrán llenar y nutrir con nuevos bríos aquello que les llevará a una aventurada empresa: luchar por un México mejor.

La excelente actuación de David Hevia (Cervantes), José Carlos Rodríguez (Shakespeare), Sonia Couoh/Cecilia Ramírez Romo (Pancha) y Guillermo Nava/Luis Eduardo Yee (Pancho) hacen de esta puesta en escena una gran experiencia cercana y empática a la vida cotidiana y los valores con los que sobrellevamos las situaciones difíciles que nos han tocado vivir.

Por su parte, los diseñadores que dan paso al espacio teatral han sabido crear el ambiente propicio, la escenografía dinámica y versátil, así como el vestuario propio de la época corren a cargo de Mario Marín del Río; la banda sonora es un trabajo de Ignacio García y la iluminación y video de Raúl Munguía.

Cervantes versos Shakespeare, se presenta hasta el 29 de octubre de octubre, en la sala Xavier Villaurrutia del Centro Cultural del Bosque, una relectura de Aurora Cano sobre los textos de estos dos grandes literatos para ser estrenada en el 400 aniversario luctuoso de ambos escritores en la edición 2016 del Festival Cervantino a partir de la necesidad de confrontar la estructura de pensamiento del siglo XVII con el desencanto ideológico del siglo XXI.

“Intento mostrar un mundo al que solo pueden acceder los lluviosos, es decir, los hombres y mujeres tempestuosos y perdidos que en su momento más bajo encuentran una cierta sabiduría. Busco provocar una reflexión en el espectador, ofrecer un pequeño espacio de pensamiento y perturbación moral”, Aurora Cano.