
Por: Colaborador Invitado — 26 de septiembre, 2013
El pasado 20 de septiembre, el Centro Cultural Roberto Cantoral en la Ciudad de México fue el lugar donde los grupos Escalandrum y La Camorra se dieron cita para rendir tributo al maestro que dio a la música contemporánea argentina un nuevo aire.
Astor Piazzolla fue el creador del llamado “nuevo tangoâ€, un estilo que abrió las puertas a una nueva generación de músicos que estaban listos para integrar la complejidad inventiva del jazz y fusionarlo con el seductivo ritmo nacido en las orillas del RÃo de Plata.
No hace falta hablar sobre los logros de Piazzolla –considerado uno de los músicos mas influyentes del siglo pasado– porque a él hay que escucharlo, y para rendir tributo al gran gurú del bandoneón argentino, nuestra ciudad recibió por primera ocasión a dos de los mejores exponentes de su música, herederos de un legado, quienes hoy mantienen en evolución su música: Escalandrum y La Camorra.
Con una trayectoria de más de catorce años, la banda argentina Escalandrum, –nominado al Grammy Latino por mejor álbum instrumental– arrancó la noche maravillando al publico, bajo el liderazgo de Daniel Piazzolla, nieto del homenajeado y baterista excepcional que dejó ver y oÃr su fuerte inclinación al jazz. El “Pipi†–como es conocido en el ámbito tanguero– daba el toque nostálgico a la memoria del interpretado.
Por su parte, La Camorra fue la seginda agrupación bonaerense que deleitó a la audiencia mexicana, este quinteto que toma su nombre de una de las piezas más importantes de Piazzolla también cuenta con más de dos décadas cautivando a los amantes del género en diversas partes del mundo.
La Camorra fue sin duda más conservador en cuanto a su estilo para interpretar sus piezas, pero esto no quiere decir que no tenÃa nada que aportar a la mesa, ya que para la audiencia no tan conocedora como puede ser la argentimna, el grupo sobrepasó las expectativas de muchos.
El violÃn de Sebastián Prusak sonó espectacular, poniendo “la piel de gallina” al interpretar La serie de los ángeles. Principalmente entre éstas, la Milonga del Ãngel fue la pieza que cubrió de nostalgia la oscura Sala del Roberto Cantoral que esporádicamente se iluminaba por los relámpagos de la tormenta que ocurrió ese dÃa.
Este ensamble transmitió su pasión y experiencia en el género desde la primera nota. Luciano Jungman, el único bandoneón del concierto serpenteaba hipnóticamente su instrumento como una cobra siguiendo a su domador, Hugo César Asrin hacia vibrar las parcas con las graves notas de su contrabajo y Jorge Omar Kohan nos deleitaba con una guitarra suave y poco acaparadora.
Dentro de este tributo, una de las piezas claves fue Nicolas Guerschberg, el pianista de La Camorra, quien fungió entre la transición de ambos grupos. La maestrÃa con que su instrumento fue tocado generó algo fastuoso y el público se lo dejó saber al recibir la mayor cantidad de ovaciones al final del espectáculo.
Por su parte, Escalandrum nos ofreció un giro mas energético y contemporáneo, caracterizando su presentación con la improvisación de sus experimentados músicos, Mariano Sivori nos regaló unos increÃbles solos con su contrabajo y Daniel “Pipi†Piazzolla marcaba el ritmo con percusiones desde clásicos del jazz hasta tomos más tribales. Escalandrum logró sorprender al público con sus interpretaciones fuera del estándar piazzollano.
Como todo buen concierto, lo mejor fue guardado para el final. En una gran jam session, Escalandrum y La Camorra se compaginaron para lograr una celebración sonora y presentar por todo lo alto el “nuevo tango†que Astor Piazzolla visionó en su tiempo, el balance perfecto entre la tradición argentina del bandoneón, la sofisticación clásica del violÃn y la creatividad jazzÃstica de las percusiones. The Piazzolla Project, el homenaje al gran maestro del tango realmente fue un concierto verdaderamente memorable, a la altura del mejor tango.
Un listado de enlaces a centros culturales, música, teatro, danza, infantiles, festivales y medios y más.
Me hubiese encantado estar ahÃ! 🙂
Gracias por este artÃculo muy interesante que usted!