Susana Harp presentó Aguadiosa, un recital que conmovió y llevó al público a la reflexión

Por: Roberto Sosa — 21 de octubre, 2012

Susana Harp presentó Aguadiosa en el Teatro de Ciudad Esperanza Iris, octubre 2012 “Pocos sabemos que México está dentro de los cinco países del planeta con mayor biodiversidad y esto no solo es motivo de orgullo, también es de gran responsabilidad, así que Aguadiosa es un maravilloso camino que nos lleva al disfrute y a la reflexión, es la alquimia entre música y biodiversidad”, Susana Harp.

Susana Harp presentó Aguadiosa el viernes 12 y sábado 13 de octubre del presente año, en el Teatro de Ciudad Esperanza Iris. En este concierto donde escuchamos los temas de está su última producción discográfica la cantautora estuvo acompañada por los músicos Marco Morel, Carlos García, Jako González, Paolo Marcellini, Daniel López, Jeisel Torres y el decimista José Samuel Aguilera.

Esta presentación contó con el apoyo de la Secretaría de Cultura del Gobierno del Distrito Federal; la grabación del disco y el material seleccionado fue gracias al sustento de la Comisión Nacional para el Conocimiento y uso de la Biodiversidad. Un concierto muy particular donde se escucharon canciones provenientes de las culturas originarias de México que se han desarrollado en los diferentes ecosistemas.

Susana Harp presentó Aguadiosa en el Teatro de Ciudad Esperanza Iris, octubre 2012 Así las imágenes se proyectaron al fondo del escenario, Susana Harp hacia la interpretación y el espectador fue testigo del daño al medio ambiente… imágenes que exponían todo el deterioro, el detrimento que le hemos causado a nuestro entorno; también se podían observar retratos de las especies de animales ya extintas en México. Con su música y con su canto, Susana, nos llevo a la reflexión y terminó por conmover al espectador.

“Aguadiosa es un proyecto inspirado por las diversas regiones de México y sus ecosistemas, con el propósito de que las personas descubran aún más ese legado y lo hagan suyo. Es un festejo para los sentidos donde entre música, fotografía y décimas se entretejen los cantos tradicionales de las culturas mexicanas que se han desarrollado a lo largo de los siglos en los diversos ecosistemas que hay en nuestro país: sones huastecos, jarochos, chilenas, sones caribeños, pirecuas, un disco dinde el público podrá empaparse como tierra fértil de este mensaje”, Susana Harp.

Susana Harp presentó Aguadiosa en el Teatro de Ciudad Esperanza Iris, octubre 2012 Fue un concierto distinto, no cantó chilenas, no hubo huapangos, no se disfrutó como tantas veces de sus interpretaciones de siempre, fue un recital para levantar la voz, para sacudir conciencias, para gritar ¿Quién parará esta locura? (título de la canción con la que cerró el concierto).

Como especie, los humanos nos hemos convertido en una plaga en este planeta; nuestra mezquina ambición no tiene límite y como toda infortunio, terminaremos por consumirlo todo y cuando esto suceda, no habrá mañana.

El recital dio inicio con País de las maravillas, le siguió Wiyeri niukiyari, huichol (lluvia de palabras), El gusto, La guanábana, Agua Marina, Tiringuen Tsutsuki (florecita morada, en purépecha), El negro de la costa, El amuleto; antes de cada interpretación el poeta José Samuel Aguilera recitaba décimas que hablaban del paisaje, de los lugares y sitios que llenaban de belleza nuestro país y que ahora con el desarrollo industrial, con el uso indebido del agua, con nuestra forma de vida actual, lo hemos dañado tanto.

Susana Harp presentó Aguadiosa en el Teatro de Ciudad Esperanza Iris, octubre 2012 Susana Harp concluyó esta presentación en el Teatro de la Ciudad con Jpas Abtel (Carguero, en totzil), Aguadiosa (tema del concierto), Canto de amor y desesperanza al Río Papaloapan, Casi, Un día en la vida de Fabiola, Mi corazón me recuerda, Lluvia de tu cielo, Se vive así, y ¿Quién parará esta locura? Con el aplauso del público, la oaxaqueña regresó para cantar El chuchumbé, y el encoré fue Mi ciudad de Guadalupe Trigo, que fue como un bálsamo para el dolor que traíamos atravesado.

Al salir del recinto, no me sentía feliz, tenía los ojos nublados; me duele ser parte de ésta especie, de contribuir a este daño al medio ambiente y coraje conmigo mismo por no hacer nada. Desde aquí le pido perdón al planeta por el daño causado; le pido perdón a toda las especies vivas por el deterioro a su hábitat, la cual ha causado la extinción de muchas de ellas; le pido perdón al agua, al aire que hemos contaminado… gracias Susana por la reflexión que dejas con este concierto y tu maravilloso proyecto: Aguadiosa.

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“Uno no debe permitirse salir al escenario sin estar preparado en cuanto al conocimiento del personaje que se interpreta, si el ballet tiene una historia hay que contarla y vivirla lo mas real posible. Como intérprete, el reto es hacer llegar y entender al público la historia solo con los movimientos del cuerpo”, Raúl Fernández, diciembre 2009.