Rescatan La Marsellesa y la presentan en el Teatro Cervantes de Málaga

Por: María Esther Beltrán Martínez — 12 de junio, 2011

Málaga, España.- La reposición de la obra de Manuel Fernández Caballero; La Marsellesa, fue premiada con las ovaciones del público que disfrutó por casi dos horas, de la pieza en tres actos, que se presentó con éxito en el Teatro Cervantes de Málaga.

Historiadores españoles destacan que está obra se estrenó con gran éxito en el Teatro de la Zarzuela en 1876. El éxito fue tan grande que el final del acto primero se repitió tres veces y se programó enseguida en otras plazas entre la que se encontró el Teatro Cervantes de Málaga en la misma temporada 1876-77 de la mano de la compañía de Francisco Arderíus.

El panorama lírico malagueño celebró la excelente forma de rendir homenaje a un notable autor español a través de uno de sus títulos musicalmente más ambiciosos. Con unas excelentes interpretaciones de María Rodríguez en el papel de Flora, Ruth Rosique quien dio vida a Magdalena Dietrich, Alejandro Roy a Rouget de L’Isle, Francisco J. Sánchez encarnando a San Martín, Juan Manuel Corado en el rol de Renard y María Lourdes Benítez como La marquesa.

Con una escenografía sencilla pero dinámica dio vida a la zarzuela al combinar en el escenario la acción real con las imágenes proyectadas en una pantalla gigante. Los asistentes disfrutaron del argumento de una de las grandes obras del teatro lírico español que está dedicada al nacimiento del himno nacional francés y a su autor Rouget de L’Isle, víctima como tantos otros patriotas de la persecución revolucionaria. La Marsellesa ofrece una partitura extensa compuesta por veintitrés fragmentos musicales con la particularidad de su cercanía a la ópera.

Sobre la obra el director musical, Lorenzo Ramos, indicó que la música esta adaptada con precisión al dramatismo de la trama, tanto en las escenas íntimas, en las que siempre brilló la gran inspiración melódica de Caballero, como en los grandes concertantes y números corales, llenos de pujanza y dramatismo. La frecuente presencia del famoso himno es introducida por el autor con singular maestría, subrayando situaciones escénicas muy diferenciadas.

Agregó que el libreto de Ramos Carrión resulta realmente atractivo dado que la acción se desarrolla durante la revolución francesa. “El libretista construye, alrededor de la figura de Rouget de L’Isle, una historia de amor, celos, traición, intriga y abnegación que conforma un sólido melodrama. La presencia de escenas cómicas, heredadas del teatro clásico y habituales en el género, se insertan en el ambiente eminentemente dramático que preside la obra con sorprendente verosimilitud. Es una coproducción nueva, el estreno en términos modernos de una obra que no ha sido tocada en el último siglo”.

Manuel Fernández Caballero pertenece a una generación intermedia entre la Barbieri, Arrieta y Gaztambide, indicadores del renacimiento del género a medidados del XIX, y la de Chapi, Chueca y Bretón, que culminaría una época dorada a finales del siglo.

Su inspiración melódica y facilidad para componer obras de muy diversa índole, manteniendo un sello inconfundible, le permitió ocupar durante muchos años un puesto entre los más destacados compositores de su tiempo y el privilegio de que algunas de las obras permanezcan entre los títulos más representados en la actualidad. Fotos: Daniel Pérez / Teatro Cervantes