De Menotti L’amour à trois o ¡auxilio el teléfono no me deja (y no me importa)!

Por: Josué Romero — 6 de mayo, 2014

A la ópera o la amas o la odias, no hay más. Se trata de un género completo que en ocasiones puede intimidar al propio espectador, aun cuando pueda tener finas comedias que bien pueden servir de instintivo o introducción a esta disciplina para los menos conocedores, tal es el caso de la pieza The Thelephone or L’Amour à trois del compositor italo-americano Gian Carlo Menotti, elegida para iniciar el primer ciclo de Ópera de cámara que celebra el Centro Cultural Helénico.

Bajo el título, De Menotti L’amour à trois, esta es una divertida puesta –que sin renunciar al aspecto lúdico– nos obliga a reflexionar acerca del consumismo y la banalidad de la sociedad contemporánea vista a través de la relación que tenemos con el teléfono celular.

Se trata de una propuesta amena que refleja una bien lograda complementación entre la dirección musical de Josué Cerón en combinación con el trazo escénico de María Teresa Paulín, quien en cada sonido y cada gesto de los actores-cantantes va más allá de la farsa, incluso llega al absurdo y al paroxismo total pues se burla de todo lo anquilosado.

Escrita hace más de medio siglo, pareciera que L’amour à trois es más pertinente hoy debido a las nuevas formas de comunicarnos y nuestra dependencia de los celulares, es así que para la directora se trató de un trabajo donde presente y pasado están ligados de forma indisoluble y esto debe verse plasmado en la escena.

“En realidad Menotti es un autor visionario, su obra resulta más vigente ahora que en 1947 cuando fue escrita y me parece que la pieza habla por si sola en relación al pasado y presente. En cuanto al trazo escénico, yo trabajo con secuencias de movimientos basadas en la estilización corporal. De entrada la obra es una propuesta rigurosa que exige muchísimo de los cantantes, para ellos ha sido todo un reto porque no sólo tienen que cantar, además deben moverse en escena en diferentes calidades de movimiento y bajo un rigor muy exigente. Toda la puesta en escena se mueve con un engranaje muy preciso como en un reloj, en el cual cada elemento tiene que entrar en un momento perfecto. Cada nota, cada gesto del cantante tiene que ser de forma precisa en esta relojería para que pueda funcionar. Aquí no solamente está el reto de la música, sino también el reto del movimiento, de la interpretación escénica de los cantantes que tienen que tocar el corazón del público”, María Teresa Paulín.

Con un escenario austero donde sólo aparece un cuadro de arte moderno, un candelabro art déco, un piano de cola y un teléfono celular, los actores Josué Cerón, Andrés Sarre y Alejandra Sandoval dan vida a la historia de Ben, quien contrata a un pianista para así pedirle matrimonio a Lucy antes de irse de viaje, todo marcha por buen camino hasta que sale un tercero en discordia, un adversario que le roba por completo la atención de su amada: el teléfono, objeto que sirve como hilo conductor para presentar una divertida pieza operística que le apuesta a la calidad de sus intérpretes para llegar y quedarse en el gusto del público. En este rubro cabe mencionar el trabajo de Martha Llamas y Jorge Ruvalcaba, quienes suman sus voces a las de los otros protagonistas para lograr una obra redonda donde no falta nada.

“L’amour à trois es conocida porque es una ópera de cámara donde suelen subir los musicos al escenario bajo la convención de que no están ahí en ese momento, sin embargo, en esta propuesta el pianista (Andrés Sarre) está presente como otro más de los protagonistas”, María Teresa Paulín.

Con una maestría en movimiento trascultural, la directora ha buscado hacer un tipo de puesta en escena que pudiera ser comprendida por un público sin importar la lengua o la cultura, objetivo que es alcanzado satisfatoriamente en este trabajo que sin importar el lenguaje (es interpretada en inglés y cuenta con subtítulos) logra atrapar la atención del público de principio a fin.

Conformado por dos partes, la primera como una gala con lo mejor del repertorio de Gian Carlo Menotti y la segunda por la ópera The Thelephone or L’Amour à trois del mismo autor italo-americano, este espectáculo es una producción de la compañía Naranja-Escena, Miguel Moreno y la propia María Teresa Paulín, que tendrá una breve temporada (del 5 al 8 de mayo) en el Teatro Helénico, un proyecto para escuchar con ojos y oídos.

De Menotti L’amour à trois, una oportunidad para difrutar de la ópera de otra manera. Una reflexión entorno a ese tercer amante que ha surgido en la actualidad y que cuestiona qué tipo de relación quieres con tu Smartphone, sólo habría que recordar que éste no tiene labios para besar.