
Por: Enrique R. Mirabal — 1 de octubre, 2013
A partir del 6 de octubre, comienza, en la ciudad de Guanajuato, el Festival Internacional Cervantino (FIC) en su cuadragésimo primer aniversario. Como es sabido, hay extensiones del Festival en diferentes ciudades de la República.
No todos los espectáculos o solistas podrán ser valorados más allá de la ciudad sede pero, en tiempos de sequÃa artÃstica todo es bienvenido. A la Ciudad de México, nos llegarán el pianista Cyprien Katsaris y la soprano Barbara Frittoli, por ejemplo. Nada mal, tratándose de intérpretes señeros en sus respectivas disciplinas.
No es necesario recordar lo que todos sabemos y nos lo han machacado desde un año antes de la celebración: en este 2013, Richard Wagner y Giuseppe Verdi, de estar vivos, Dios nos guarde, cumplirÃan doscientos años. Verdaderamente, estos homenajes no dejan de tener un tufillo mercadológico que valida a los teatros de ópera para programar las siempre muy gustadas obras de dichos compositores pero sin el estigma de la repetición ad nauseam que la crÃtica les endilga. De Wagner y Verdi, precisamente, están nutridos los recitales de Katsaris y Frittolli.
La soprano de fama internacional ofrecerá un recital acompañada al piano por Mzia Bakhtouridze en el Palacio de Bellas Artes el 22 de octubre con un programa que repite el dÃa 26 en Guanajuato, a saber, cantará Seis romanzas de Giuseppe Verdi, los Wesendonck Lieder de Richard Wagner (una de esas piezas que piden a gritos la orquesta por la fuerza de la costumbre) y Cuatro canciones de Amaranta de Paolo Tosti.
La soprano milanesa ha sido vista y oÃda en las transmisiones en vivo desde el Met en el Auditorio en Carmen y, si la memoria no nos falla, en Don Giovanni, amén de quienes sigan la carrera de la artista por los principales teatros del mundo. No es para tanto en todo caso.
Cyprien Katsaris, figura más o menos recurrente en las salas mexicanas, como bien lo afirma el pianista orgullosamente en sus declaraciones a la prensa, también desplegará su vigorosa técnica con las transcripciones para piano que Franz Liszt hiciera sobre las óperas de su yerno. Liszt admiraba y casi veneraba a Wagner; este último se dirÃa que lo toleraba por ser el padre de su última esposa, Cósima Liszt, sin tomar en cuenta las diferentes creencias religiosas, estilos de vida y, esencialmente, los principios estéticos de cada uno de los compositores: pomposos ambos pero Wagner muy en serio; no obstante, las versiones y transcripciones que realizó Liszt a las óperas del alemán, han permitido a los pianistas competir en virtuosismo y resistencia con los obesos intérpretes lÃricos de Bayreuth. Katsaris tocará en el D.F. el lunes 7 de octubre en Bellas Artes y, en Guanajuato, el viernes 11 de octubre.
Sin repetir la programación que anexamos, sólo haremos hincapié en una iniciativa del FIC que nos dará la oportunidad de escuchar en vivo la ópera El emperador de la Atlántida (Der Kaiser von Atlantis) de Viktor Ullmann, una vÃctima más entre los millones de judÃos muertos en los campos de exterminio nazis. Curiosa coincidencia, en el año que se recuerda a Wagner, un connotado antisemita que llegó a pregonar y anticipar el genocidio como solución para eliminar a los judÃos del panorama musical alemán. Hitler se encargarÃa de hacerlo extensivo a todas las profesiones y oficios.
Ullmann fue discÃpulo de Schoenberg y Zemlinsky -también vinculado a Mahler-, luchó en la Primera Guerra Mundial como súbdito del Imperio Austro-Húngaro y recibió como recompensa macabra, su pase directo al campo de concentración en Terezin donde estrenó la ópera en cuestión, caso similar al Cuarteto para el fin de los tiempos del francés católico Olivier Messiaen, obra estrenada también en un campo nazi donde era prisionero Messiaen. Viktor Ullmann fue trasladado a Auschwitz para morir en las cámaras de gas en 1944. Le sobreviven pocas de las muchÃsimas obras de diverso corte que escribió a lo largo de su corta vida (1898-1944).
El catálogo que el propio compositor creó en Terezin nos da fe de la productiva carrera de Ullmann: obras para voz y orquesta, sextetos, obras concertantes, cantatas, música incidental para teatro y otras óperas aparte de El emperador de la Atlántida (no de la Antártida como se ha anunciado erróneamente). La mayorÃa de estas obras desaparecieron durante la Segunda Guerra Mundial y no se tiene noticia de que se hayan salvado de la destrucción, o peor, de la indiferencia o ignorancia de quienes se las hayan topado.
El Ensamble Iberoamericano será el encargado de dar a conocer esta singular ópera al público mexicano, la dirección del maestro Juan Carlos Lomónaco. La parte escénica a cargo de Hugo Hiriart y las voces de José Adán Pérez, Enrique Ãngeles y José Cerón. En caso de que no se represente fuera de Guanajuato, valdrÃa la pena el viaje hasta la ciudad cervantina. Ullmann es trascendente por su obra, por su estética muy enraizada en las vanguardias del siglo XX, a tono con la República de Weimar y la Viena de Zweig, además de estar impregnada por un humor corrosivo y por el optimismo y solidaridad del que hizo gala en tiempos tan nefastos.
Esperemos que esta puesta dé pie a otras similares y se rescate a los compositores que los nazis bautizaron como degenerados y se deje de tocar hasta el hartazgo la melcochosa Carmina Burana del abiertamente nazi Carl Orff.
La CompañÃa Nacional de Ópera (CNO) también se ha dedicado a celebrar a Wagner y, en coproducción con el FIC, ha montado El holandés errante, dirigida en lo musical por Niksa Bareza y, en lo escénico por Arturo Gama.
Los papeles principales serán interpretados por Genaro SulvaraÌn, Bastiaan Everink, MoÌnica ChaÌvez y Lee Bisset. A juzgar por los videos mostrados por la CNO, el montaje tiene similitudes con el proyecto de La fura dels baus para la tetralogÃa wagneriana. Quizás sea una apreciación a priori pero la fórmula-tendencia de nuestros dÃas, nos inclina a pensar en la influencia catalana.
Entre los invitados restantes que se presentarán en Bellas Artes, en primer lugar (no hay mucho de dónde escoger) la Orquesta Barroca de Friburgo cuyo nivel artÃstico es su mejor carta de presentación, asà como la dirección de Brian Dean. En este concierto se escucharán obras de Keiser, Haendel, Telemann, Locatelli y Rameau.
La Orquesta Sinfónica de PekÃn es una interrogante abierta hasta no escucharla, por lo pronto diremos que será dirigida por Tan Lihua y como solista invitada la flautista Tang-Jun-Qiao. El programa a interpretar integra obras de Suo Wenjing, Sergei Prokófiev y Modest Mussorgski. El timonel sigue vivo.
Hasta aquà algo de lo que más nos conquista del Cervantino, para enterarnos de todo lo que se presentará en esta edición 2013, se puede visitar la página oficial: http://www.festivalcervantino.gob.mx/
Un listado de enlaces a centros culturales, música, teatro, danza, infantiles, festivales y medios y más.
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