Mario Maya, una vida dedicada al arte flamenco

Por: Fritzi Mazari — 10 de octubre, 2008

“Tuve el enorme privilegio de estar cerca de él muchos años y tener la fortuna de compartir proyectos juntos, pareciera que de pronto me quedé sin brújula. Era un fuerte referente en mi vida artística y mi vida personal. Lo que puedo decir es que el maestro Maya fue fuente de sabiduría… aún no terminaba de nutrir los vastos campos del flamenco. Buscaremos la forma para hacer de su legado un patrimonio vivo, para que sus enseñanzas, testimonio y consejos nutran a las nuevas generaciones”, Lourdes Lecona.

Mario Maya, una vida dedicada al arte flamenco (1937-2008) De estrecha relación con nuestro país, Mario Maya, uno de los más grandes exponentes del flamenco en España y el mundo, falleció el pasado 27 de septiembre en Sevilla, España.

Su comprometida labor con la comunidad artística en México representó una intrínsica relación para la profesionalización del gremio dancístico y en especial, el del flamenco. Su significativa contribución, además de estrecha amistad con varias de las excelsas representantes del género en nuestro país, propició el fortalecimiento cultural entre España y México.

Mario Maya quien recibió la Medalla de Plata en Andalucía y el Premio Nacional de Danza del Ministerio de Cultura en 1992, mantuvo siempre una estrecha relación con México, a través de instituciones como el INBA, el CNA y la UNAM, logrando una destacada labor docente y contribución en la difusión del flamenco, lo que propició el fortalecimiento de lazos culturales entre ambos países.

Mario Maya, una vida dedicada al arte flamenco (1937-2008) Una de sus últimas visitas ocurrió en diciembre del año pasado, cuando el gremio en México tuvo el privilegio de contar con la presencia de este artista como invitado a la XX Feria Internacional del Libro de Guadalajara, como parte de las destacadas personalidades de la Región de Andalucía, la cual fungía como invitada de honor a este tradicional evento literario.

En este marco, el maestro Maya impartió las conferencias magistrales Andalucía, el sustrato, y La multiplicidad en las corrientes de hoy en el flamenco, así como un Seminario Internacional que se llevó a cabo en diversos espacios del Centro Nacional de las Artes, en el que impartieron clases artistas de prestigio internacional como: Ofelia Medina (arte teatral), Isabel Bayón y “El Junco” (danza flamenca), “La Tremendita” (cante), Emilio Maya y Jesús Torres (guitarra flamenca), Carmen Correa y Rafael Santiago (clases de clásico y entrenamiento corporal).

Esto se tradujo en una oportunidad para que los profesionales de flamenco en cualquiera de sus diferentes manifestaciones pudieran actualizar sus conocimientos a partir del estudio y comprensión de las nuevas formas de expresión del flamenco.

En su compromiso con la enseñanza del baile flamenco, danza clásica y de jazz, fundó el Centro de Actividades Mario Maya y compartió con el público mexicano una de sus más recientes obras, Andalucía, el flamenco y la humanidad, bajo la producción de la Agencia Andaluza para el Desarrollo del Flamenco.

Mario Maya, una vida dedicada al arte flamenco (1937-2008) Por esta gran aportación a nuestro país fue retribuido con un reconocimiento entregado por Benjamín Juárez Echenique, Director General del Centro Nacional de las Artes y Elizabeth Cámara, Directora del Cenidi-Danza “José Limón”.

“Mario Maya es el bailaor que más me ha gustado y conmovido en la vida, he sido su fan desde hace muchos años. Es una pérdida grande, un gran talento que se nos va. Pérdidas tan fuertes, tan grandes… La trayectoria de Mario ha sido muy importante, él inició con los espectáculos de danza teatro, siempre en defensa de los gitanos”, María Antonia “La Morris”.

Mario Maya nació en Córdoba, España en 1937, desde niño vivió en Granada donde inició su actividad artística a temprana edad bailando para los turistas en las Cuevas de Sacromonte. De 1956 a 1958 formó parte del Ballet de Pilar López con el cual realizó giras por diversos países. En 1959 trabajó en el Corral de la Morería formando pareja con La Chuga.

En 1965, se trasladó a Nueva York, donde ofreció su primer concierto de baile flamenco, tras el cual fue contratado por la Columbia Artist Management y dio numerosos recitales. De nuevo en España, creó con Carmen Mora y El Güito, el Trío de Madrid.

En 1974, presentó su espectáculo Ceremonial, texto de Juan de Loxa, que constituyó el primer intento de crear un nuevo teatro flamenco. En 1976, estrenó en Granada Camelamos Naquerar, con libreto de José Heredia Maya. En 1977 presentó Ay, jondo, con coplas y poemas de Juan de Loxa.

Mario Maya, una vida dedicada al arte flamenco (1937-2008) Otro de sus montajes con los que dio la vuelta al mundo fue el titulado Amargo, sobre poemas de Federico García Lorca, estrenado en el Festival de Chateauvallon en 1980. A esta propuesta le siguieron Tiempo, amor y muerte, Tres movimientos flamencos, Réquiem y De lo Flamenco, Mundial de Esquí y Andalucía, el Flamenco y la Humanidad, entre otras propuestas.

Mario Maya fue galardonado con diversos premios y reconocimientos entre los que destacan: Danza y Coreografía Vicente Escudero (1976), Baile Cátedra de Flamencología (1977), Nacional de Danza y Compás del Cante (1992).

En agosto de 2001, se editó el libro Homenaje a Mario Maya, XLI Festival Internacional del Cante de Minas. En 2005, el artista recibe el Galardón Flamenco Calle de Alcalá.

“De pronto el mundo del Flamenco se estremece con la noticia de una pérdida enorme. Uno de los puntales del Flamenco se ha marchado, ha emprendido el viaje del que no se regresa más. Mario Maya, mi amigo, mi maestro… Siento un gran vacío. GRACIAS MARIO, SI ME ESCUCHAS, GRACIAS SIEMPRE”, Patricia Linares.

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“Uno no debe permitirse salir al escenario sin estar preparado en cuanto al conocimiento del personaje que se interpreta, si el ballet tiene una historia hay que contarla y vivirla lo mas real posible. Como intérprete, el reto es hacer llegar y entender al público la historia solo con los movimientos del cuerpo”, Raúl Fernández, diciembre 2009.