Umbo… un espectáculo para bebés novedoso y estimulante…

Por: Claudia Magun — 13 de marzo, 2013

“Es importante incluir a los bebés como parte del público teatral, porque es un sector de la sociedad abandonado en ese sentido. En música y en la televisión hay muchas propuestas, sin embargo en el ámbito teatral se ha limitado”, Adrián Hernández.

Sí para aquellos que disfrutamos del teatro es difícil que se nos cautive, imaginemos que será para los teatreros el pretender encontrar la fórmula para convencer al público infantil. Para el creador no es lo mismo entretener a los infantes que al adulto, para éste la coyuntura radica entre divertimento y análisis, en cambio los peques no son presa fácil y realmente debe de ser una tarea afanosa el cómo llegar a captar la atención de esas pequeñas mentes que con la imaginación suplen la razón, es complicado que ellos aguanten un espectáculo sin caer en el aburrimiento y las ganas de salir corriendo…

Y si en la mira está hacer un espectáculo teatral para los bebés ¿qué se puede hacer? Porque si los niños y adolescentes son todo un reto qué será el descubrir cómo se llega a conceptualizar una idea cuyo propósito sean los bebés o digamos, los consentidos de los abuelos.

Para Teatro al Vacío –ensamble diferente que en su concepto creativo pretenden lograr una estructura escénica como una secuencia de estímulos visuales, sonoros y táctiles y con ello sorprender a un público mucho más difícil de convencer–, el crear un ejercicio para bebés fue llegar a Umbo: una idea colectiva que ofrece una experiencia gozosa, estimulante y lúdica a través de una simulación de acciones, imágenes, sonidos y silencios.

Una propuesta escénica para niñas y niños de 0 a 3 años de edad que promueve la equidad y busca la inclusión de un público que hace muy poco comenzó a ser considerado; es así que pensando en esta consideración Umbo se integra a las producciones de la Coordinación Nacional de Teatro del INBA que través del Programa de Teatro para Niños y Jóvenes y con esto inicia este novedoso proyecto ideado por este ensamble conformado por los actores Adrián Hernández, José Agüero e Inés López de Arriaga.

Umbo es una co-producción del Programa Alas y Raíces del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes Teatro que realiza temporada, hasta el 26 de mayo, en el Teatro El Galeón del Centro Cultural del Bosque, con funciones los sábados y domingos, una nueva aventura que invita a los pequeñines a descubrir un universo sensible y simbólico que se relaciona con la necesidad de jugar y explorar, descubriendo cómo ser nosotros mismos, cómo comunicarnos, entender y conocer a los otros.

Bajo esa perspectiva, Teatro al Vacío reflexiona acerca del derecho de los niños más pequeños al arte: “Es algo que requiere más atención de la que hasta ahora le hemos dedicado. No es raro el rechazo del teatro para los más pequeños y esto tiene que ver con dos cosas: por un lado, el concepto, muchas veces acotado, que tenemos de lo que es el teatro; por otro, el concepto de infancia, la imagen que tenemos construida sobre las niñas y los niños, y qué tanto esperamos de ellos”, Adrián Hernández.

Teatro al Vacío, como dice Hernández, es un grupo que comparte la necesidad de comenzar un proceso de búsqueda permanente, apoyado en una disciplina y una formación constantes, por un teatro que trasciende en el espectador en tanto que trasciende en el actor; un teatro honesto y no impuesto, hecho por el actor y generado por las necesidades esenciales del mismo; un teatro donde el actor es un creador.

Pensando es este complicado proyecto y considerando las características y necesidades del público que va dirigido, el ensamble estructura a Umbo como un espacio contenedor donde una secuencia de estímulos visuales, sonoros y táctiles buscan sorprender de manera sutil a partir de una propuesta honesta y responsable que promueva la comunicación directa con los espectadores en un montaje que se aleja de la representación sin dejar de ser una experiencia significativa.

“Nosotros hemos trabajado con público de tres a seis años y para acercarnos a ellos descubrimos qué les interesa y qué les llama la atención; ellos pueden seguir los estímulos más allá de entender una historia. Es una experiencia pre-verbal profunda y sensorial; esto nos estimula a hacer teatro para este público específico”, Adrián Hernández.

Umbo es diferente, novedoso y estimulante. Mirar, oír, tocar, rosar, acariciar son parte de esta experiencia. Los sonidos, colores y el movimiento conectan a estos pequeños espectadores con ese mundo en el que les toca vivir…