Chorritos, cacharros y hasta pestañas: El mundo de Cri Crí se transporta a la danza contemporánea

Por: Colaborador Invitado — 18 de septiembre, 2008

Chorritos, cacharros y hasta pestañas integra las composiciones de Francisco Gabilondo Soler con la danza contemporánea, en la historia de un niño influenciado por las nuevas tecnologías que se enfrenta a la soledad en una tarde sin luz; lo que lo motiva al desarrollo de la imaginación con la ayuda de una vieja radio que lo lleva a los dominios de Cri-Crí, con su música, personajes y ritmos.

El Ballet Juvenil Siglo XXI presenta una versión remasterizada de este espectáculo para niñas y niños, los sábados y domingos de septiembre, en el marco del ciclo El vuelo del colibrí, de la temporada La danza y sus especies del Centro Nacional de las Artes (CENART).

La agrupación debutó con Chorritos, cacharros y hasta pestañas en el 2005 en el CENART y ahora llega de nueva cuenta para el divertimento de la familia, agregando nuevos cuadros coreográficos con personajes como la abuelita que usa un patín del diablo, el ropavejero y su costal, y el negrito bailarín con vestuario moderno.

“El montaje desde un primer momento se realizó pensando en los infantes, un público que muchas veces está descuidado por los creadores y puede ser el más exigente al empezar a gritar en medio de la obra o aplaudir e imitar fragmentos al finalizar”, mencionó el coreógrafo y director del espectáculo, Jorge Luis Hernández.

A lo anterior agregó: “El trabajo de Cri-crí ha fascinado a varias generaciones, sus historias se valen de recursos que fomentan valores universales como la unión familiar, la amistad y la cooperación”.

Esta puesta en escena, se estructuró a partir de los temas: Baile de los muñecos, Che araña, La muñeca fea, La maquinita, El chivito ciclista, Di por qué, Gato de barrio, El ropavejero, Negrito bailarín y Juan pestañas.

Katia de la Torre, Estefanía de la Vega, Margarita González, Lourdes León y Jorge Luis Hernández darán vida a los diversos personajes, transmitiendo el regalo más preciado que dejó Gabilondo Soler: su arte.

Chorritos, cacharros y hasta pestañas se escenificará en el Teatro Raúl Flores Canelo del Centro Nacional de las Artes, los sábados 20 y 27 y los domingos 21 y 28 de septiembre. Fotos: Lulú León