Omar Meza y Da.te Danza estrenan Belleza Durmiente, obra consebida por y para los adolescentes

Por: Colaborador Invitado — 29 de junio, 2009

“Cuando el héroe ya no está, estás tú mismo…”

Enmarcada en el Festival Internacional de Música y Danza de Granada, Da.te Danza estrenó el pasado 6 de junio, la coreografía Belleza Durmiente.

Con esta obra dedicada a los adolescentes la compañía española pretende demostrar a la sociedad que los jóvenes existen y tienen una gran riqueza interna, para ello fue esencial que ellos se convitieran en miembros activos e internos del proceso de la creación.

Como una cortesía para Interescena, Omar Meza, director y coreógrafo de Da.te Danza, amablemente nos envío desde España una entrevista que le realizaron con motivo del estreno de Belleza Durmiente.

¿Cómo surge Belleza Durmiente?
OM. Como hace siempre Da.te Danza, juntos decidimos crear nuestra propia obra sobre La Bella Durmiente, transformar el cuento en metáfora, en este caso dirigido a los adolescentes.

Comenzamos a trabajar sobre la metáfora de esa Bella durmiente o ese Bello durmiente que tenemos todos los seres humanos cuando somos adolescentes. De ahí parte la idea y nace un proceso de investigación.

Creo que la adolescencia es el momento más interesante que tiene el ser humano, es cuando tiene toda la potencia, toda la fuerza. El momento en el que decide qué va a ser en su vida, hombre, mujer o quimera.

Después de ese proceso de investigación, tocamos la dramaturgia porque veíamos que todo lo que habían escrito los adolescentes tenía mucho significado, tenía un potencial muy grande, y podíamos escribir más cosas con la carta en la que ellos habían escrito, cómo se verán ellos dentro de treinta años.

A partir de esto, Da.te Danza mantuvo reuniones con los jóvenes donde se les pedía su opinión para hacerles partícipes del proceso como parte activa de la obra.
Seguimos con la escenografía, que es la primera vez que la hacemos antes de tiempo, trabajando conjuntamente con el compositor, con la directora del Teatro.

Marcamos la dramaturgia espacial, la dramaturgia escénica, cómo podemos dar el significado a cada espacio: están en la habitación, están en la calle, están en la discoteca… Espacios a partir de los cuales trabajamos en todo el proceso de movimientos, con Yutaka Takei (Asistente de Coreografía), que para mí ha sido una belleza enorme tener a este artista trabajando con nosotros, porque tiene corazón, tiene alma, y yo creo que es importante compartir con artistas; al igual que con Valeria Frabetti (dirección de escena) y Juan Mata (Dramaturgia)… pero lo remarco a él porque es novedoso para mí, nunca había trabajado con un coreógrafo conjuntamente, y es la primera vez que me enfrento a esto y ha sido siendo una experiencia muy bella.

Rafael Liñán (Composición Musical), también se entregó en la composición, retocó otra vez la música para intentar entender la dramaturgia dentro de ese espacio sonoro y dramático de la obra. Los intérpretes lograron trascender al sufrimiento y sacrificio que en muchas ocasiones supone el mundo de la danza.

¿Qué supone para Da.te Danza actuar en un teatro como el del Nuevo Espacio de Caja Granada?
OM. El que Da.te Danza tenga un marco como el Festival Internacional de Música y Danza de Granada, y un espacio como el del Teatro Isidoro Máiquez, es un gran regalo. Significa valorar el trabajo de la compañía de todos sus años, y sobre todo su calidad de trabajo. Para nosotros más que un trabajo es un gran regalo el poder sentirnos reconocidos incluso en Granada, donde muchos dicen que no se les reconoce. Tengo mucho que agradecerle a tanta gente, al Festival Internacional de Música y a Danza de Granadal, al Teatro Alhambra, al Ministerio de Cultura, a la Junta de Andalucía…

¿Qué buscabais de los adolescentes y qué os han aportado?
OM. Este ha sido también uno de los puntos innovadores para mí. Consistía en que ellos marcaran el tempo, la calidad y la creación, porque ellos han sido los ejes motores del proceso creativo de esta obra.

Ellos son los que nos han inspirado con sus palabras, con sus actitudes… Es una obra para ellos y nos han dado muchísimo, nos han dado espacio escénico, nos han dado personalidad para los intérpretes, calidad de movimientos, calidad de textos, todo un mundo que como creador y adulto ignoras porque echas mano de tus propias experiencias y generalmente las más cercanas.

¿Cómo ha sido el proceso para ellos?
OM. Hablé con uno de los chicos, y decía que para él estaba siendo maravilloso, me pedía cuando nos íbamos que quería volver a verla. Para ellos es también un proceso novedoso, trabajar en un proceso artístico que nunca habían vivido, en cámaras, que les pregunten cosas teatrales… Es muy difícil que te toque en la vida algo así, estoy segurísimo de que esta experiencia les cambiará el rumbo de su vida, porque te cambia la perspectiva de las cosas.

¿Esta obra va a suponer un punto de inflexión en la trayectoria de Da.te Danza?
OM. Creo que sí, nunca habíamos trabajado para adolescentes y es la primera vez que lo hacemos. Es como todas las creaciones, siempre es un reto pero también un descubrimiento. Hasta el momento todas las partes que hemos tocado han sido un nuevo espacio para Da.te Danza, de creación, de magia, de metáforas, de sensaciones, por lo que es un claro avance para la compañía, además tenemos un nuevo público al cual entender y con el cual poder comunicarnos.

¿Qué os ha sorprendido de esas Bellezas Durmientes?
OM. A mí me han sorprendido esos caracteres de las personas y ver cómo puedes hacer en el camino que un adolescente se pierda, se construya o reconstruya. Veía una obra de arte en Vitoria y hablaba de cómo hay que derrotar al héroe, porque cuando el héroe ya no está, estás tú mismo. Estas tú solo y te tienes que reconstruir para seguir tu camino.

Los adolescentes son tan frágiles en algunos momentos que los adultos tenemos en nuestras manos el poder de manipularlos y destrozarles la vida. Cualquier detalle puede despistarles y llevarles a otro camino. Lo que necesitan es que los entendamos y los respetemos.

¿Qué importancia tiene para Da.te Danza el valor del arte?
Yo siempre defiendo que la filosofía de Da.te Danza es trabajar para el público pero de una forma consciente, que el arte no sea simplemente una herramienta de trabajo. Tiene que haber una implicación social, emocional y filosófica. Esto es una empresa de arte, y el arte siempre tiene una función social, y –como siempre digo– es hacer al hombre más humano, tocarle la sensibilidad.

Si el arte me ha cambiado la vida, es capaz de cambiársela a los demás. Y eso es lo que quiero de Da.te Danza, que sea consciente del por qué y para qué.