Con el pie derecho

Por: Colaborador Invitado — 2 de enero, 2007

La constancia es la base del perfeccionamiento. Lo que en un momento dado puede parecer tedioso es, sin embargo, una actitud necesaria para conseguir metas a corto y mediano plazo, sobre todo en aquellas disciplinas -llámese matemáticas, física, acrobacia, gimnasia, danza- donde el proceso de prueba y error constituyen la base sobre la cual cimentar los conocimientos futuros.

En el caso de la danza clásica en particular, la constancia a través de la repetición por horas de ejercicios específicos tienen propósitos bien dirigidos: además de buscar el estiramiento de los músculos y la flexibilidad en general, la perfección de la técnica se vuelve fundamental, sobre todo considerando que el cuerpo se convierte en el medio de expresión del intérprete, donde el discurso, como todo lenguaje, debe seguir lineamientos preestablecidos para poder establecer un diálogo fructífero con el espectador.

Sin embargo, la enseñanza de la danza clásica en nuestro país ha tenido diversos altibajos que en cierta medida no ha permitido su desarrollo de una manera óptima, lo cual no significa tampoco que tenga deficiencias imposibles de subsanar.

En este sentido “en el año de 1994, como resultado de la reorganización académica de las escuelas del Instituto Nacional de Bellas Artes, comienza la carrera de Licenciatura en Docencia de la Danza Clásica en la recién denominada Escuela de Danza Clásica y Contemporánea”, como un esfuerzo por parte de las autoridades para reorganizar lo que hasta ese momento era un sistema de enseñanza un tanto disperso y por lo mismo desarticulado.

No obstante, entre las principales carencias aún persistentes hasta hace poco era la inexistencia de “un material escrito de referencia para la Didáctica de la Especialidad… en donde se plasmaran las características, objetivos, fases y etapas de cada uno de los elementos técnicos a estudiar en cada año, de manera que se optimizara el tiempo de la clase, se unificaran los principios de la enseñanza y se evitara el dictado”.

Ante este necesidad, el Centro Nacional de las Artes, el Gobierno del Estado de Michoacán, el Programa de Apoyo a la Docencia, Investigación y difusión de la Artes (PADID) y la Escuela Nacional de Danza Clásica y Contemporánea (ENDCC) se dieron a la tarea de editar el volumen Bases metodológicas referenciales. Técnica de la danza clásica Nivel elemental, libro que sintetiza “la experiencia profesional y académica de los autores, que tratan además de retomar, en la medida de lo posible, los frutos más representativos de los principios metodológicos usados por los docentes de más experiencia de la ENDCC, así como las bases de la metodología de la Escuela Cubana de Ballet”.

Con la edición de este libro se trata entonces de llenar ese hueco en la didáctica, con miras a hacer más eficiente el proceso enseñanza-aprendizaje. Dividido en ocho capítulos y apoyado en un material fotográfico de gran valía para el estudiante de danza clásica, el contenido de sus páginas se enfoca a explicar lo más claro posible cada uno de los ejercicios básicos que constituyen el nivel elemental: port de bras, pasos de conexión, pas de basque, temps lié, battements, rond de jambe, giros, saltos, batería y puntas.

Así pues, con la puerta que abre Bases metodológicas referenciales. Técnica de la danza clásica. Nivel elemental, esperemos que éste no sea el único esfuerzo para subsanar las carencias existentes en el sistema educativo en nuestro país.