
Por: Susana Fernández — 11 de octubre, 2006
El pasado mes de septiembre Interescena cumplió un año. Doce largos meses donde el trabajo y esfuerzo por querer cubrir y difundir de forma pertinente todas las expresiones escénicas realizadas con calidad, no sólo en esta gran urbe sino en algunos otros puntos estratégicos que conforman este vasto paÃs, ha sido el objetivo principal de quienes hacemos y construimos este espacio.
Hoy, reconfortadamente, podemos decir que el universo cultural –al menos en esta ciudad- es tan amplio que no siempre es fácil elegir y, más complejo aún, decidir que entra o en este caso sube en lÃnea. Atrás ha quedado la sequÃa de conciertos o eventos multidisciplinarios que hace más o menos dos décadas permeaba en todo el paÃs. Y hay que decirlo, los espacios culturales han hendido un camino fundamental para hacer de la vida cultural, un ente en movimiento y constante retroalimentación.
Si bien es cierto, que hoy la oferta se ha multiplicado, ésta no hubiera sido posible sin la aventura y riesgo de quienes se lanzaron a la construcción de nuevos espacios escénicos o bien a la democratización de las instituciones, abriéndole la puerta a una nueva generación de jóvenes creadores que hoy han logrado éxito en el teatro, la música y la danza.
En este sentido, los productores independientes, que todavÃa quedan algunos y es importante resaltarlo, y el dominio hegemónico de OCESA también han colaborado para hacer una cartelera cada dÃa más rica, multidisciplinaria, intercultural y frecuente en los teatros y foros del paÃs.
En una mirada rápida a la oferta de divertimento para un fin de semana, un ciudadano puede elegir entre dos o tres eventos internacionales, o en su lugar algún concierto con las instituciones nacionales, una puesta escénica a la altura de las mejores del mundo, un espectáculo de danza de alguna de las diversas compañÃas contemporáneas que permanentemente se presentan en los distintos foros de esta ciudad e incluso, algún espectáculo gratuito de alta calidad. Cierto es que el factor económico influye, pero en busca de una mayor afluencia en los foros, distintas instituciones han instaurado ofertas para hacer más atractivos los escenarios y golpear menos los bolsillos.
Esta ciudad, generosa y con muchos lugares aún por descubrir, cuenta hoy con una gran variedad de espectáculos que incluso pueden convertirse en una industria más, generadora de turismo, capital e inversión.
Si hoy un gigante del entretenimiento como OCESA puede programar hasta 10 conciertos, de diversos estilos y corrientes, en un mes; o por otra parte, tener en cartelera más de cuatro obras de excelente taquilla, la industria del espectáculo deberÃa hoy más que nunca apoyar a quienes con aventura y confianza traen o promueven eventos en esta ciudad y el paÃs.
Existe una gran oferta, pero en una ciudad tan grande como la nuestra, falta por hacer…
Un listado de enlaces a centros culturales, música, teatro, danza, infantiles, festivales y medios y más.