No tenemos, no pagamos… o cuando el destino nos alcance

Por: Roberto Sosa — 27 de agosto, 2013

En 1974, Darío Fo escribió Sotto paga, non si paga, una farsa que pone en contexto los problemas económicos y sociales de una comunidad.

En una ciudad cualquiera, personajes comunes están a punto de cambiar el rumbo de su existencia, ante la desmesurada alza en los precios y el encarecimiento de la vida: el hartazgo de sus gobernantes.

La farsa no es fácil de representar, hay una delgada línea entre lo ridículo y lograr un trabajo de calidad. El rigor de los actores para la interpretación de este género teatral se pone aprueba durante el desarrollo de No tenemos, no pagamos, propuesta del grupo Tercer Teatro donde logran demostrar su versatilidad –algunos de los integrantes tocan instrumentos musicales y cantan- y preparación para adentrarse en el manejo de la comedia, sin caer en lo grotesco o lo simplón, reto superado que en esta ocasión con buen tino.

Con la puesta en escena No tenemos, no pagamos, Adrián Ladrón hace una gran adaptación libre de la obra de Fo, que el autor italiano, ganador del Premio Nobel de Literatura, escribió casi cuatro décadas atrás.

Un texto tan vigente, como los problemas que nos aquejan en la actualidad, una realidad que se muestra hoy y que con el paso del tiempo no ha perdido vigencia, por el contrario pareciera que fuera escrita ayer.

Los protagonistas de esta historia nos hablan de una realidad que en muchos países –como el nuestro- viven a diario, tratan de sobrevivir con los pocos recursos económicos que consiguen con sueldos de miseria que obtienen a través de su trabajo. El encarecimiento en los alimentos, provoca que las mujeres de esta comunidad tomen por asalto un súper mercado para robar los víveres.

La realidad como espejo desde el escenario; la farsa y la comedia para contar un relato, un divertimento, pero que nos duele desde dentro. Lo que nos lleva a la risa, es así mismo lo que nos traslada al dolor de nuestra más cercana cotidianidad.

Las cosas han cambiado poco o nada en cuarenta años, y eso es preocupante. El teatro es una vez más el provocador, la tribuna… el foro para la reflexión.

“Es una obra que después de 40 años es más vigente que nunca, sigue habiendo abusos de poder, de injusticia, los precios siguen subiendo, la gente se sigue manifestando, cada vez hay más brotes de hartazgo social y hay una sensación de impotencia e injusticia. El espectador está muy cansado de ver lo doloroso de su realidad. Esta es una invitación a ver las cosas que nos afectan con un sentido del humor muy ácido, muy fino. Invitamos a la reflexión y a pasar un rato agradable”, Adrián Ladrón.

Tercer Teatro presenta su versión de Sotto paga, non si paga, con la puesta en escena No tenemos, no pagamos, adaptación y dirección de Adrián Ladrón. Un ejercicio lúdico que lleva las actuaciones de Francia Castañeda, Isabel Almeida, Sergio Solís, Yanet Miranda, Sandra Garibaldi, Ricardo Zárraga y el propio Adrián Ladrón.

Un elenco de gran calidad escénica que al ritmo de estilos como el rockabilly, blues y jazz se presentará de jueves a domingo –hasta el 8 de septiembre– en el Foro de la Artes del Centro Nacional de las Artes y posteriormente realizará una corta corta temporada en el Teatro Sergio Magaña.

No tenemos, no pagamos, es un ejercicio de humor para reflexionar en torno a nuestra realidad, incluidas las marchas, protestas y demás manifestaciones sociales que hoy parecen habernos sobrepasado.

“No sólo se trata de pasar un buen rato, pues el objetivo es que el público se vaya conmovido, ya que si bien en un momento se puede reír de la situación, la realidad es que actualmente los salarios, para las mayorías, ya no alcanzan. También es difícil para nosotros, pero nos apasiona lo que hacemos”, Ricardo Zárraga.