Drums United, invitado de lujo en el Ollin Kan

Por: Paola Zamora — 9 de mayo, 2013

Décimo Festival Ollin Kan… un diálogo permanente entre las músicas del mundo y las culturas en resistencia. Del 2 al 12 de mayo, una fiesta cultural que rescata la música sagrada en peligro de extinción, el evento que muestra las culturas que se resisten a desaparecer y por eso se mueven.

Para celebrar la inauguración del X Festival Internacional Ollin Kan, el cual estuvo apoyado por el Gobierno de la Ciudad de México, a través de la Secretaría de Cultura, la Coordinación del Sistema de Teatros y la Delegación Coyoacán, así como del gobierno del estado de Morelos, por conducto de su Secretaría de Cultura para el desarrollo del mismo en ese lugar, los organizadores contaron con un acto de apertura que une lo mejor del mundo en aspectos de percusión.

El lugar escogido para albergar este evento, fue el Teatro de la Ciudad “Esperanza Iris” un recinto que sin duda recuerda los mejores años de la urbe citadina. La combinación de arquitectura clásica con música del todo mundo y sobre todo vanguardista, hizo que el espectáculo sobresaliera de manera formidable.

El inicio de la presentación comenzó con un pequeño discurso por parte de uno de los organizadores del Festival, quién agradeció los asistentes y colaboradores por participar en proyectos que le otorgan mayor apertura cultural a la Ciudad de México. De ahí comenzó la presentación del grupo de apertura, las palabras eran de regocijo y de inmensa alegría por poder presentar a Drums United, un grupo que no conoce fronteras.

Las luces comenzaron a atenuarse y uno a uno los integrantes aparecieron en el escenario. El primero de ellos, casualmente el ultimo integrante en unirse al proyecto, fue Mathias Holzner ‘Dj Collin Spectre’ en la tornamesa desde Alemania, seguido de Alper Kekec de Turquía con el tambor oriental, después aparecieron en escena Mousse Pathe Mbaye de Senegal y Pape Thiam de Walo, respectivamente, inmediatamente se les unió Marco Toro de Venezuela así como Gianna Tam de Surinam como la voz principal.

Finalmente apareció Lucas van Merwijk de Holanda, en la bateria y el show de percusiones comenzó. Cabe mencionar que este último, front man del proyecto, recibió en 2010 el Global Act Award, el cual se otorga a los músicos que a lo largo del tiempo, han sido pieza fundamental en el desarrollo de la música global.

Siguiendo con el concierto, el grupo presento su más reciente producción HeartBeat, un disco que envuelve una serie de ritmos africanos, latinos, españoles, indios y ritmos electrónicos contemporáneos. Hubo intervenciones por parte del líder tanto en español como en inglés para dar una breve reseña de las composiciones.

Además del talento que cada uno de los músicos posee, el hecho de hacer un evento en conjunto con el público es lo que lo hace más sustancioso y disfrutable.

El publico, a pesar de ser poco, se vio animado y entusiasmado por los músicos y es que ver como se adueñan del escenario y sobre todo como son expertos en las percusiones, deja a los espectadores con un buen sabor de boca e incluso más, con un sentimiento de alivio; quien diría que la batería sería sinónimo de tranquilidad.

Un recorrido por las naciones es lo que se vivió la tarde-noche del jueves 2 de mayo en el Teatro de la Ciudad, un viaje que inicio en Europa pasando por África hasta llegar a América Latina, donde las composiciones demostraban que todo en conjunto puede lograr algo extraordinario y más con personas que viven y sienten la música día a día. No hay duda que este tipo de agrupaciones dejan más allá de lo que se ve en el escenario; la emoción se contagia y la fiesta al ritmo del tambor es pieza fundamental para saberse parte del proyecto.

Cada una de las composiciones del este nuevo álbum tienen un común denominador con su disco pasado World of Rhythm, los dos trabajos incluyen esta combinación perfecta de percusiones tradicionales con elementos electrónicos y actos de danza y canto; no cabe duda que Drums United es un proyecto de reconocimiento y comprensión global en materia musical y es que eso se notó en cada uno de los integrantes, quienes eran parte del acto de sus compañeros.

Ese día, no importo que hubiera poca afluencia de asistentes, los que asistieron estaban entregados y sorprendidos de lo mucho que las percusiones podían animar y motivar. Niños, jóvenes, adultos, parejas, grupos de amigos y hasta familias completas se dieron cita para disfrutar la inauguración del Festival Ollin Kan 2013, el cual se ha implantado como uno de los favoritos y consentidos del público nacional, pues desde hace más de una década, ha luchado por la apertura de nuevos espacios hacia proyectos que buscan que la creatividad musical y artística sea el principal elemento de unidad y difusión entre la sociedad.

Un Ollin Kan renovado pero siempre fiel a sus raíces, no ha cesado la batalla cultural y para celebrar tantos años de lucha, mejor agrupación no pudo elegir. Drums United representa creatividad, innovación, apertura y pasión por lo que se hace, situación parecida a este Festival que ha logrado la formación de públicos alternativos, ávidos de nuevas experiencias musicales y culturales. Ahora con el apoyo de las dependencias gubernamentales dedicadas a la difusión y promoción sociocultural, el proyecto puede respirar pues la lucha ha logrado que la apertura llegue hasta ellos y se les de un lugar en la agenda cultural del país.