Teatro

Crónica de un presentimiento: crisis y humor

Por: Oswaldo Valdovinos — 19 de noviembre, 2007

XXVIII Muestra Nacional de Teatro
Zacatecas, Méx., lunes 19 de noviembre

Crónica de un presentimiento bajo la dirección de Conchi León se presentó en la XXVIII Muestra Nacional de Teatro en Zacatecas La apuesta por lo absurdo es una de las formas de tratar de escapar de la soledad. Es, además, una muy buena vía para evadirse de la monotonía y la desesperanza, de los días vacíos y las noches en vela a la espera de que algo venga a cambiar el hastío y la inmovilidad que poco a poco carcome el de por sí abatido espíritu humano. De ahí que se busque afanosamente la forma de ir pasando la vida de una manera rápida y sin complicaciones existenciales, aunque para ello haya que encerrarse en pequeños microcosmos que, irremediablemente, se habrán de contaminar de los mismos males de los que se busca eludir.

Estas referencias sirven como base para la puesta en escena Crónica de un presentimiento, de Concepción León Mora, bajo la dirección de Conchi León y las actuaciones de Marilú Bolívar, Laura Zubieta, Conchi León y Pedro Sánchez, obra representante del estado de Yucatán, presentada el domingo 18 en el teatro del IMSS dentro del programa de la XXVIII Muestra Nacional de Teatro.

La obra narra la historia de tres mujeres: una entre los 40 y los 50 años de edad, aficionada a las telenovelas, en las que ve reflejadas cómo la vida puede ser una verdadera patraña cuando se trata de pasar esas historias rosas, cursis, y con final feliz, al ámbito de la realidad; otra de treinta y tantos, dueña de un pequeño salón de belleza, donde Crónica de un presentimiento bajo la dirección de Conchi León se presentó en la XXVIII Muestra Nacional de Teatro en Zacatecas invariablemente escucha una cantidad infinita de historias de otras mujeres como ella, por lo que está acostumbrada a decir sí a todo a diestra y siniestra, aunque ello implique ir en contra de sus propias convicciones o creencias; y una tercera, una joven de veintitantos años, cuyo mayor pesar es saberse hija de una mujer que, sin llegar a ser vidente, es capaz de saber lo que va a ocurrir en un futuro inmediato. Tres mujeres que comparten, además de las soledades respectivas, un estigma impuesto por la sociedad contemporánea: ser mujeres robustas, con pocas posibilidades a la “felicidad” y con muchos pesares por delante.

A este devenir se añaden las intervenciones del locutor del programa de radio “El rincón de las olvidadas”, a partir del cual se establece un diálogo muy sui géneris entre ellas y las canciones que enmarcan las diversas facetas por las que pasan antes de confluir en un mismo punto: el instante en que el locutor regala a tres radioescuchas “un hongo milagroso capaz de cumplir cualquier deseo”.

Así pues, desde el momento de tener el hongo en sus manos, y como si se tratase de un hijo, un amante o un compañero incidental, las tres mujeres verterán en él cada uno de los deseos incumplidos, de sus nociones de afecto o reproches que, esperan, las llevarán a esa reconciliación a su interior. Crónica de un presentimiento bajo la dirección de Conchi León se presentó en la XXVIII Muestra Nacional de Teatro en Zacatecas O al menos eso es lo que creen hasta escuchar, en voz del propio locutor, que en realidad el tan mentado hongo de la suerte es bastante tóxico y hay que desecharlo a la mayor brevedad.

Tal situación las llevará a encontrarse en la playa y establecer un vínculo tácito sobre la mejor manera de eliminar a esos bichos apestosos, que “cada vez se parecen más a un ser humano”. Por supuesto la solución se complica en la misma medida en que el hongo crece y crece más, hasta el grado de parecer, ahora sí, un pequeño bebé. Y aunque la solución final es destazar a los tres engendros, sólo pueden matar a dos, pues en cuento tratan de incinerar al tercero se desata una tormenta como si se tratase de un reclamo del infecto ser, cuya maldición condena a las tres mujeres a quedar petrificadas en la playa.

Con una escenografía bien planeada, a la manera de una fotografía que sintetiza una playa desvastada por un huracán; una iluminación acertada, que en cierto momento de la trama, a la par de un juego de telones, simboliza de una manera plástica una tormenta, y un manejo adecuado del espacio, Crónica de un presentimiento una apuesta por el humor basado en el trabajo actoral y el texto como principales vehículos de reflexión en torno a las diversas maneras de afrontar la soledad, evitando en todo momento caer en el melodrama.

Los comentarios están cerrados.

Directorio

Un listado de enlaces a centros culturales, música, teatro, danza, infantiles, festivales y medios y más.

“Uno no debe permitirse salir al escenario sin estar preparado en cuanto al conocimiento del personaje que se interpreta, si el ballet tiene una historia hay que contarla y vivirla lo mas real posible. Como intérprete, el reto es hacer llegar y entender al público la historia solo con los movimientos del cuerpo”, Raúl Fernández, diciembre 2009.