Philippe Jaroussky con Le Concert de la Loge en el Palacio de Bellas Artes

Por: Fritzi Mazari — 15 de abril, 2017

“Lo que hago al cantar es un viaje interior. Trato de crear con cada parte un gran fresco musical. Cuando se trata de conmover a la gente, se pierde la meta. Por eso yo no busco controlar al público, pero si llegan a suceder dos o tres momentos importantes, con eso logro mi objetivo…” Philippe Jaroussky.

Farinelli –sobrenombre del italiano Carlo Broschi– era el cantante que en el siglo XVIII, conquistaba Europa, entre ellos a Felipe V de España a quien cada noche le cantaba para apaciguar su depresión, después lo sería de su hijo, Fernando VI y de muchos más emblemáticos protagonistas de la realeza del Viejo Continente a los que el capón conquistó con su voz…

En el siglo XXI esa personalidad que conquistó a la aristocracia europea se identifica con la del francés Philippe Jaroussky, quien –por supuesto, sin haber sido castrado– posee esa misma plenitud de matices y agilidad vocal que seduce al interpretar personajes que protagoniza en producciones de gran formato, además de recitales más íntimos donde cautiva al escucha con pasajes que sintetizan los mejores momentos del arte del belcanto a partir del conocimiento y apreciación de un basto repertorio creado por grandes autores como Antonio Vivaldi, Giovanni Battista, Alessandro Scarlatti, Pierre Menault, Claudio Monteverdi, Giovanni Battista y el alemán Georg Friedrich Händel.

Es precisamente de este último autor alemán la selección escogida por Philippe Jaroussky para su presentación hoy sábado 15 de abril en el Palacio de Bellas Artes, una noche de gala donde el contratenor acompañado por Le Concert de la Loge, ensamble de instrumentos de época fundado en 2015 por el violinista Julien Chauvin, ofrece un repertorio excelso conformado por recitativos y arias de óperas que proyectan la pasión y dramatismo que revela en cada actuación este cantante que en mayo del año pasado conquistó al público mexicano presente en este mismo escenario con un programa de música francesa, en aquella ocasión fue acompañado al piano por Jérôme Ducros.

Jaroussky, desde niño ha sido un apasionado de su carrera musical, primero con el violín y el piano, posteriormente descubriría su talento para el canto. Ese don lo ha llevado a ser aclamado en los más prestigiosos festivales y salas de concierto alrededor del mundo como el Opernhaus de Zurich, Tonhalle de Dusseldof, la Opéra Royal de Paris, el Konzerhaus de Viena, la Sala Philharmonie de Hamburgo y en la Konzerthaus de Berlin donde fue artista residente en la temporada 2015-2016.

Una carrera plena que ha sido avalada por su colaboración con algunos de los mejores ensambles del mundo, como la Orquesta Barroca de Friburgo, la Accademia Bizantina, Les Arts Florissants, Le Concert d’Astrée, L’Arpeggiata, Concerto Köln, Les Musiciens du Louvre-Grenoble, la Orquesta Australiana Brandeburgo, I Barocchisti, Appolo’s Fire, Anima Eterna, la Orquesta Barroca de Venecia y el Ensemble Artaserse, agrupación que él mismo fundó en 2002.

El concierto de Philippe Jaroussky en la Ciudad de México un prefacio antes de su visita a Lima, Santiago de Chile, Sao Paulo, en Bogotá, para regresar a Europa en el mes de mayo invitado por la NDR Elbphilharmonie Orchester dirigida por Thomas Hengelbrock en la interpretación de obras de Purcell, Berlioz, Mendelssohn y Bartholdy…

Una noche en el Palacio de Bellas Artes que atesora la magnificencia de Georg Friedrich Händel, un autor que en cada partitura descubre una sonoridad única plagada de la riqueza de la música europea y en especial la herencia italiana que atesoran sus composiciones a través de la presencia de Philippe Jaroussky en este escenario de gran belleza, legado arquitectónico de aquella la llamada Ciudad de los Palacios.