Vladimir Nabokov presenta We need to kill Lolita, una obra incómoda

Por: Interescena informa — 25 de julio, 2015

A partir de la célebre novela Lolita, escrita por el autor ruso Vladimir Nabokov, Edwin Salas Acosta lleva escena We need to kill Lolita, una singular propuesta donde el artista crea su propia historia, proponiendo el castigo de la “nínfula” usurpadora de hombres (Itzhel G. Razo) y de Lolito (Edwin Salas), un hombre acusado de pervertido al enamorarse del mismo Humbert Humbert.

Seis meses duró el proceso creativo de este montaje. Además de leer y releer la novela de Nabokov, el creador fortaleció su obra con investigaciones sobre el tema de las “Lolitas”, así como con opiniones de activistas feministas que han trabajado en torno al odio y maltrato hacia el sexo femenino.

“Esta pieza es un parteaguas en mi carrera, ya que implicó un gran reto el hacer un montaje multidisciplinario, con un tema tan complejo”, Edwin Salas Acosta.

Es una propuesta escénica cruda, incómoda y con figuras violentas, cuyo lenguaje escénico está compuesto de gesticulaciones que van de lo perverso a la supuesta inocencia. Cabe destacar que los textos son de la autoría del reconocido dramaturgo José Alberto Gallardo, quien da voz a esta historia que muestra cómo hay hombres que lastiman a mujeres por ser mujeres.

En el caso de We need to kill Lolita, se decubre cómo asesinan a una niña por ser lo que es: una Lolita, anteponiendo cualquier pretexto: “La obra nos dice: tenemos que matar a Lolita, a todas las Lolitas que provocan a nuestros buenos hombres, que roban a nuestros esposos”, Edwin Salas Acosta.

En esta su versión, Salas Acosta nos presenta a Humbert, quien rechaza el amor de un hombre al considerarlo depravado. Ante ese rechazo, dicho hombre decide transformase en una “Lolita”, auto castrándose y vistiéndose como la odiada nínfula.

Pero el rechazo de Humbert continúa, así que Lolito -en acto de furia y rezando a un cristo, que es Humbert-, destruye su amado biombo, el umbral simbólico de su transformación, la puerta de acceso hacia su nueva sexualidad, e invoca el espíritu de la madre muerta de Lolita, Charlotte Haze, para que lo ayude a vengarse.

We need to kill Lolita, se presenta este fin de semana en laCantera, un espectáculo multidisciplinario que combina teatro de sombras, marionetas de animación directa, teatro físico con momentos de danza y performance. Una obra profunda que denuncia el abuso de niñas menores de edad, pero también a otro tipo de problemas como el feminicidio y la homofobia, dice el creador, quien aclara que la obra es apta sólo para adolescentes y adultos.

“Debo señalar que mi propuesta no es una copia fiel de la novela. Es una ficción de la ficción. Podría pensarse que es una continuación de la historia de Nabokov y sus personajes pero con una nueva historia creada por mí, donde un hombre de 40 años se enamora de Humbert Humbert”, Edwin Salas Acosta.