Exceso de equipaje, confronta al público con sus propias soledades

Por: Interescena informa — 4 de julio, 2015

Vivir con miedos, frustraciones, secretos, anhelos y expectativas resulta cómodo para la mayoría de las personas, pues les ayuda a seguir ancladas en un pasado que no quieren olvidar. Pero ¿qué sucede cuando a causa de este equipaje emocional no podemos relacionarnos con los demás…?

Pilar Cerecedo lleva a escena Exceso de equipaje, obra que cuestiona las relaciones humanas a partir de 15 microdramas que se suceden en un escenario donde una maleta es el foco de atención para invitar al espectador a identificarse y ¿por qué no? a reflexionar acerca del “lado B de las relaciones afectivas y de la causa del vivir cargando aquello que nos dificulta seguir adelante en la vida”, asegura Cerecedo.

Hasta ahora, Pilar Cerecedo es egresada de la Escuela Nacional de Arte Teatral del INBA y ha participado como actriz en más de 30 puestas en escena, entre ellas, Riñón de cerdo para el desconsuelo, Fatwa y El pájaro Dziú, por mencionar algunas, ahora emprende una nueva aventura en la dirección de escena, su debut lo marca precisamente Exceso de equipaje.

Una obra donde el espectador se vuelve partícipe de diferentes historias que dibujan momentos conflictivos en la vida de las parejas: aquellos cuando una maleta hace su aparición para señalar un viaje, una ruptura, una llegada, un secreto y otros instantes: “la mayor parte del tiempo los seres humanos somos ridículos en nuestras acciones, pues no sabemos manejarlas; si no tuviéramos equipaje emocional que nos impida liberarnos, podríamos ir por la vida más ligeros, libres y honestos, sin frenar lo que deseamos hacer”, Pilar Cerecedo.

“La idea es confrontar al público con sus propias soledades, separaciones y desconfianzas; eso pretende este montaje y, a la vez, darnos la posibilidad de saber que se puede seguir el camino o volver a empezar, pero más ligero de equipaje”, Pilar Cerecedo.

Exceso de equipaje, escrita por Alberto Castillo se presenta con la actuación de Romina Coccio, Miguel Conde y Arnoldo Picazzo, en temporada de viernes a domingo (hasta el 26 de julio), en el Teatro Sergio Magaña, un encuentro con el teatro breve en un mismo escenario donde el público, como destaca la directora, “se va a identificar con alguna de las situaciones que planteamos, pues en ella retratamos circunstancias muy cotidianas que todos alguna vez hemos vivido”. Fotos: Alfredo Millan.