Con los aires del Cervantino, la Camerata Porteña se presenta en el Palacio de Bellas Artes

Por: Interescena informa — 19 de octubre, 2016

“Hay momentos en la vida de un artista donde uno obtiene la cosecha sembrada; tocar aquí es cosechar el trabajo de muchos años, cuidando la estética de la música y buscando dar lo que el público merece”, Marcelo Rodríguez Scilla.

Para el deleite de los amantes del buen tango, el Palacio de Bellas Artes presenta hoy miércoles 19 de octubre a la Camerata Porteña, toda una institución del tango argentino que llega a la Ciudad de México con los aires del Festival Internacional Cervantino para ofrecer un espectáculo que descubre en su música desde la tradición de Astor Piazzolla hasta los remansos de sueños y pasiones tangueras de los famosos salones de baile, una expresión que refleja la cultura y el modo de vida de la tierra de Gardel.

La Camerata Porteña es considerada la heredera de Astor Piazzolla, ya que se fundó a instancias del compositor argentino en 1986, bajo la dirección del joven compositor, arreglista y director Marcelo Rodríguez Scilla. Su trayectoria es avalada por la crítica especializada, como “los auténticos herederos de Piazzolla”, no solo por el modo interpretativo de sus obras, sino también por el estilo vanguardista de composiciones propias con las que logran fusionar la precisión y sutileza de la música clásica con la fuerza interpretativa del tango contemporáneo.

Esta presentación estelar en el recinto de mármol forma parte de una gira que el ensamble realiza por diferentes países latinoamericanos como Ecuador, Colombia, Panamá y otros importantes escenarios de la región que incluyen el concierto que ofrecieron el pasado jueves 13 de octubre en la Explanada de la Alhóndiga de Granaditas en Guanajuato, así como otras cuatro actuaciones en territorio mexicano.

Bajo la dirección de Marcelo Rodríguez Scilla, la Camerata Porteña presenta en el Palacio de Bellas Artes un programa dedicado a Piazzolla donde el público escuchará un recorrido por los grandes momentos de la música argentina con piezas como Libertango, Primavera Porteña, La Muerte del Ángel, La Bicicleta Blanca, Balada para un Loco, Sueño Tango, Balada para un Loco, Los Pájaros Perdidos y el tan recordado Adiós Nonino.

“Hicimos una selección de lo más relevante tanto de obras de Piazzolla como las propias, para el Palacio de Bellas Artes, aunque no muy conocido, de épocas que van de los años 50 a los 80, que habitualmente creemos, aportan a una suerte de post-innovación en el panorama contemporáneo de Buenos Aires”, Marcelo Rodríguez Scilla.